Créditos y Derechos de la Imagen: Max Inwood (Para ver una versión más detallada haga clic sobre la imagen)
El precioso cúmulo estelar de las Pléyades brilla en el cielo nocturno de la Tierra, un grupo compacto de estrellas a unos 400 años luz de distancia en dirección de la constelación de Tauro y del Brazo de Orión de nuestra galaxia Vía Láctea. Reconocido desde tiempos antiguos, la notable reunión celestial es visible a ojo desnudo. El cúmulos de las Pléyades también está bien ubicado para verse desde ambos hemisferios norte y sur, y a lo largo de siglos se ha conectado con muchas tradiciones y celebraciones culturales, incluyendo la celebración del día de entre-cuartos llamada Halloween. En la mitología griega, las Pléyades eran siete hijas del titán astronómico Atlas y de la ninfa del mar Pléyone. Galileo fue el primero en esquematizar al cúmulo estelar visto a través de su telescopio con estrellas demasiado tenues para verse sólo con el ojo, y Charles Messier registró la posición del cúmulo como la 45a entrada en su bien conocido catálogo de cosas que no son cometas. En este dramático paisaje del cielo nocturno desde el planeta Tierra, las estrellas de las Pléyades parecen incrustadas dentro de la polvorienta nebulosa azul de reflexión, posando por encima del Monte Sefton, uno de los picos más elevados en Nueva Zelanda. Conocido allí como Matariki, el cúmulo estelar está asociado con la celebración del año nuevo Maorí.
Fuente: Astronomy Picture of the Day.
