Créditos y Derechos de la Imagen: Daniele Boffelli (Para una versión de mayor resolución siga este enlace)
Las auroras usualmente aparecen alto por encima de las nubes. El resplandor de la aurora es creado cuando partículas de rápido movimiento, eyectadas desde el Sol, impactan la magnetosfera de la Tierra, desde la cual las partículas cargadas caen en espiral a lo largo del campo magnético de la Tierra para golpear a los átomos y moléculas altas en la atmósfera de la Tierra. Por ejemplo, un átomo de oxígeno brillará en luz verde, comúnmente emitida por una aurora, luego de ser energizado por tal tipo de colisión. La parte más baja de una aurora típicamente ocurrirá a unos 100 kilómetros de altura, mientras que la mayoría de las nubes existen por debajo de los 10 kilómetros. Las alturas relativas de las nubes y las auroras se muestran claramente en la fotografía de arriba tomada en 2015 desde Dyrholaey, Islandia. Allí, un decidido astrofotógrafo soportó los vientos fuertes e los cielos inicialmente cubiertos en un intento de capturas a la aurora por encima de un pintoresco faro, sólo para tomar, por casualidad, la fotografía mostrada que incluye a nubes lenticulares alargadas captadas sobre la marcha.
Fuente: Astronomy Picture of the Day (APOD).