Créditos y Derechos de la Imagen: P. Horálek, Z. Hoder, M. Druckmüller, P. Aniol, S. Habbal / Solar Wind Sherpas
La mayoría de las fotografías no retratan adecuadamente la magnificencia de la corona del Sol. Ver a la corona de primera mano durante un eclipse total de Sol no tiene paralelo. El ojo humano puede adaptarse para ver los rasgos y extensiones coronales que las cámaras promedio no pueden. Sin embargo, bienvenidos a la era digital. La imagen central mostrada acá combina digitalmente exposiciones cortas y largas que fueron procesadas para resaltar los rasgos tenues y extendidos en la corona del eclipse solar total que ocurrió en agosto de 2017. Claramente visibles están capas intrincadas y cáusticas resplandecientes de una mezcla siempre cambiante de gas caliente y campos magnéticos en la corona del Sol. Prominencias enrolladas aparecen en rosa brillante justo más allá del limbo del Sol. Incluso se pueden distinguir detalles tenues en el lado nocturno de la Luna Nueva, iluminados por la luz solar reflejada desde el lado diurno de la Tierra llena. Las imágenes tomadas segundos antes y después del eclipse total muestran atisbos del Sol al fondo conocidos como Perlas de Baily y el Anillo de Diamante. Mañana, un nuevo eclipse total solar será visible desde partes de Suramérica.
Fuente: Astronomy Picture of the Day.