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La mayoría de nosotros observa a la Luna en la noche. Pero la Luna pasa casi tantas horas sobre el horizonte en el día como en la noche, aunque en los brillantes cielos diurnos el disco lunar se mira pálido y puede ser un poco difícil de ver. Por supuesto, en los cielos diurnos la Luna también parece pasar por su ciclo de fases, brillando por la luz solar reflejada al orbitar a nuestro planeta. Para los observadores lunares diurnos, la Luna probablemente es más fácil de encontrar cuando la porción visible iluminada por el Sol del disco lunar es grande y creciente, siguiendo al cuarto creciente o menguante aproximándose a su fase de cuarto menguante. Y aunque pueda verse inusual, una luna diurna a menudo se ve incluso en los cielos urbanos. Captada acá en una exposición con telefoto tomada el 12 de marzo, una Luna creciente diurna está alineada cerca del borde de una popular terraza de observación que mira por sobre el distrito de Manhattan en Nueva York.
Fuente: Astronomy Picture of the Day (APOD)