Créditos de la Imagen: NASA, ESA, y El Equipo del Legado del Hubble (STScI/AURA)
Mientras flotaba a través del cosmos, una magnífica nube de polvo quedó esculpida por los vientos estelares y la radiación hasta asumir una forma reconocible. Nombrada muy adecuadamente como la Nebulosa Cabeza de Caballo, está incrustada en la vasta y compleja Nebulosa de Orión (M42). Un objeto potencialmente gratificante pero difícil para verlo personalmente con un telescopio pequeño, la imagen preciosamente detallada de arriba fue tomada en 2013 en luz infrarroja por el orbital Telescopio Espacial Hubble, en honor del 23° aniversario del lanzamiento del Hubble. La nube molecular oscura, de más o menos 1,500 años luz de distancia, está catalogada como Barnard 33 y se ve principalmente porque está iluminada por detrás por la cercana estrella masiva Sigma Orionis. La Nebulosa Cabeza de Caballo cambiará lentamente su forma aparente a lo largo de unos cuantos millones de años, y será destruida a la larga por la luz estelar de alta energía.
Fuente: Astronomy Picture of the Day (APOD).