Créditos y Derechos de la Imagen: Mike Selby (Para una versión de mayor resolución siga este enlace)
A casi 70 millones de años luz de distancia, la preciosa galaxia espiral NGC 289 es más grande que nuestra propia Vía Láctea. Vista casi de frente, su brillante núcleo y colorido disco central dan paso a notables, tenues y azulados brazos espirales. Los brazos extensos barren camino a más de 100 mil años luz del centro de la galaxia. Hacia abajo a la derecha en este nítido retrato telescópico de la galaxia, el brazo espiral principal parece encontrarse con una galaxia compañera elíptica difusa interactuando con la enorme NGC 289. Por supuesto, las estrellas picudas están en el primer plano de la escena. Se encuentran dentro de la Vía Láctea en dirección de la sureña constelación de Sculptor.
Fuente: Astronomy Picture of the Day (APOD).