Créditos de la Imagen: NASA/JHU Applied Physics Lab/Carnegie Inst. Washington
Hace sólo seis años, finalmente fue mapeada la superficie entera del planeta Mercurio. Las observaciones detalladas de la sorprendente corteza del planeta más interior comenzaron y continuaron desde que la sonda robotizada MESSENGER pasó por primera vez cerca de Mercurio en 2008, y continuaron hasta que se le estrelló controladamente en 2015. Previamente, mucho de la superficie de Mercurio era desconocida dado que está muy lejos para que los telescopios en la Tierra lo vieran claramente, mientras que los sobrevuelos de la Mariner 10 en la década de los 70, observaron casi sólo la mitad. El video de arriba es una compilación de miles de imágenes de Mercurio presentada en colores exagerados para mejorar el contraste de los diferentes rasgos superficiales. Visibles en ese mundo rotatorio hay un sistema de rayos emanando desde un impacto en la zona norte que se extienden a través de la mayor parte del planeta, mientras que a mitad del video la Cuenca Caloris, de color claro, rota y se pone a la vista, un rasgo de impacto norteño antiguo que está relleno con lava. Los análisis recientes de los datos de la MESSENGER indican que Mercurio posee un núcleo interno sólido.
Fuente: Astronomy Picture of the Day.